Por qué el Gobierno echó a Mondino
A última hora del miércoles el Ejecutivo le pidió la renuncia a Diana Mondino tras 10 meses de labor frente a la cartera de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto. Horas más tarde la Oficina del Presidente anunció que el nuevo canciller es el empresario y exembajador argentino en Washington Gerardo Werthein.
Pero además, el Ejecutivo informó que se hará una auditoría entre el personal de carrera de la Cancillería, ya no por una cuestión de gastos -como ocurre en el contexto de las universidades públicas, por ejemplo- sino por una investigación netamente política: echarán a quienes sean considerados «impulsores de agendas enemigas de la libertad».
El concepto de «libertad» del gobierno libertario argentino está, ahora de manera explícita, alineado «de entrada con Estados Unidos», así que el sucesor de Diana Mondino resultó ser Gerardo Werthein, con quien Javier Milei «tiene una relación muy sólida y lo considera adecuado para esa posición», según agregó Guillermo Francos.
Lo que pasa es que Javier Milei «es muy celoso de su posición internacional y no admite ningún movimiento personal que lo contradiga», insistió el jefe de Gabinete.
A su llegada al Palacio San Martín, Gerardo Werthein aseguró que «en nuestro país hay una sola política exterior: la que define el Presidente. Y todo el equipo de la Cancillería estará alineado con esa visión».