Policiales

Máximo Thomsen apuntó contra uno de sus amigos

En un recurso legal reciente, el abogado de Máximo Thomsen, condenado a cadena perpetua por el asesinato de Fernando Báez Sosa, arrojó a la luz un aspecto previamente oscuro del caso. Thomsen, a través de su representante legal Francisco Oneto, acusó a un compañero rugbier como el iniciador del conflicto y autor del primer golpe contra la víctima.

En un recurso legal reciente, el abogado de Máximo Thomsen, condenado a cadena perpetua por el asesinato de Fernando Báez Sosa, arrojó a la luz un aspecto previamente oscuro del caso. Thomsen, a través de su representante legal Francisco Oneto, acusó a un compañero rugbier como el iniciador del conflicto y autor del primer golpe contra la víctima.

Según la declaración de Thomsen, «El que da la primera piña que derriba a Fernando Báez Sosa y lo pone fuera de combate es Enzo Comelli». Esta afirmación desafía la narrativa anteriormente establecida en el juicio. El recurso también critica la estrategia legal previa, encabezada por el abogado Hugo Tomei, que aún representa a varios coacusados. Oneto argumenta que esta estrategia no fue efectiva debido a «la incompatibilidad de intereses entre los imputados», lo que impidió a Thomsen defenderse adecuadamente.

El abogado detalló que Thomsen no pudo afirmar que no fue el protagonista principal del altercado en el boliche, sino que fue otro amigo, Blas Cinalli, quien lo inició. Además, se mencionó que no se llevó a cabo una pericia para determinar si algún golpe específico causó la muerte de Báez Sosa, y se destacó un moretón en el mentón de la víctima como posiblemente relacionado con el golpe inicial de Comelli.

Oneto también subrayó que Thomsen fue sacado del lugar por un empleado de seguridad de Le Brique antes del incidente fatal, lo que plantea dudas sobre su capacidad para ejercer violencia letal ya que éste «lo ahorcó hasta hacerlo caer desmayado». Sin embargo, la información argumenta que no fue investigada durante el juicio.

La nueva presentación busca anular el juicio anterior y calificar el crimen como «homicidio en agresión», lo que reduciría la sentencia máxima a seis años de prisión. Esto contrasta con la condena a cadena perpetua confirmada por la Cámara de Casación Penal. Según Oneto, esto significa que Thomsen, de 24 años, «no volverá a poner un pie fuera de la cárcel durante el resto de su vida, y solo saldrá de la institución penitenciaria en un féretro cuando culmine su vida en este plano material».

Cooperativa La Prensa

Cooperativa de Trabajo y Consumo Ltda La Prensa

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba