En septiembre el consumo masivo mostró otra muestra de debilidad y de que no acompaña a los indicadores positivos en torno al crédito y algunos sectores productivos. La venta en los supermercados anotó su peor registro en cinco meses, mientras que los autoservicios mayoristas no pudieron sostener la mejora que habían experimentado en agosto.
Según datos del INDEC, en el noveno mes del año los supermercados vendieron por $1,59 billones, lo cual implicó una contracción interanual del 12,8% y un retroceso del 0,4% en comparación con el mes previo. De este modo, la serie desestacionalizada del organismo mostró que se trató del mes con menor actividad desde abril.
Luego del derrumbe de diciembre, como resultado de la devaluación y la escalada de la inflación, el consumo no da señales de reactivación. No solo está lejos de recuperar el nivel de noviembre, previo a la asunción de Javier Milei como presidente, sino que también está 1% por debajo del nivel de diciembre y apenas 0,6% arriba del nivel de enero.
En cuanto a los medios de pago, volvieron a verificarse incrementos reales en las transaccione realizadas con tarjetas de crédito y con «otros medios de pago», que incluye vales, cuponeras, ticket canasta, gift card, código QR, entre otros.
Fuente: Ambito Financiero