El Mundo
Tendencia

Golpe de Estado en Bolivia: el Ejército tomó la Casa de Gobierno

“Denunciamos movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano”, afirmó el presidente Luis Arce en las redes sociales. Las acciones del Ejército boliviano en La Paz se dan en el marco de la destitución de un comandante de esa fuerza

El presidente de Bolivia, Luis Arce, se volcó a las redes sociales este miércoles para denunciar un intento de Golpe de Estado por parte de las fuerzas armadas, mientras miembros del Ejército tomaban el Palacio Quemado, la sede del Gobierno boliviano.

«Denunciamos movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano. La democracia debe respetarse», indicó.

Las acciones del Ejército boliviano en La Paz se dan en el marco de la destitución de un comandante de esa fuerza, Juan Jose Zuñiga, que tuvo lugar ayer.

Este miércoles, el militar -siguiendo su decisión de no retirarse, asistió a un acto oficial y al término de este encuentro, encabezó unas unidades que se acercaron a la plaza Murillo, en La Paz, donde funciona la sede del Gobierno. Según informan medios bolivianos, Arce se encuentra en el edificio de la administración.

Tras una primera avanzada de algunas unidades, Zúñiga amenazó con “tomar” la sede del Ejecutivo. Algunos minutos después, y luego de ingresar y retirarse de la sede de Gobierno, Zúñiga anunció que se retiraría de la plaza Murillo.

“Quieren que las Fuerzas Armadas no existan, quieren libertad en este país para hacer lo que les da la gana (…) utilizan a la gente necesitada para que a nombre de ellos tengan como objetivo llegar al poder y saquear. Hoy, el Ejército se encuentra movilizado, en emergencia, acuartelado… acudimos al clamor del pueblo. El pueblo pide basta de saqueos, basta de ultrajamientos (…) Aquí están las Fuerzas Armadas por su pueblo”, dijo en el sitio y adelantó que “seguramente pronto va a haber un nuevo gabinete”.

Además, aseguró ante la prensa que «todas las fuerzas militares participan de este movimiento» y proclamó que «van a restablecer la democracia en el país».

Asimismo, Zuñiga adelantó que «todos los presos políticos serán puestos en libertad». Entre ellos se encuentran Luis Fernando Camacho, exgobernador de Santa Cruz, y la expresidenta defacta Jeanine Áñez, ambos involucrados en el anterior golpe de Estado, perpetrado en noviembre 2019. Esta última condenó el levantamiento militar de Zuñiga.

El ex presidente boliviano, Evo Morales, aseguró que “se gesta el Golpe de Estado. En este momento se despliega personal de las Fuerzas Armadas y tanquetas en la Plaza Murillo. Convocaron a las 3:00 pm a reunión de emergencia en el Estado Mayor del Ejército en Miraflores con uniformes de combate. Convocamos a los movimientos sociales del campo y la ciudad a defender la democracia”.

“Convocamos a una Movilización Nacional para defender la Democracia frente al golpe de Estado que se gesta a la cabeza del Gral. Zuñiga. Declaramos paro general indefinido y bloqueo de caminos. No permitiremos que las Fuerzas Armadas violenten la democracia y amedrenten al pueblo”, agregó Morales.

En tanto, el titular de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dijo que su oficina “condena de la forma más enérgica los acontecimientos en #Bolivia. El Ejército debe someterse al poder civil legítimamente elegido. Enviamos nuestra solidaridad al Presidente de #Bolivia Luis Arce Catacora, su Gobierno y todo el pueblo boliviano. La comunidad internacional, la OEA y la Secretaría General no tolerarán ningún quebrantamiento del orden constitucional legítimo en #Bolivia o cualquier otro lugar”.

Luis Arce le tomó juramento a los nuevos altos mandos de las fuerzas militares

En medio de la tensión, el presidente de Bolivia, Luis Arce, le tomó juramento a los nuevos altos mandos de las fuerzas militares: José Sánchez Velásquez será el nuevo comandante del Ejército; Gerardo Zabala Álvarez, de la Fuerza Aérea, y Renán Guardia Ramírez, de la Armada.

«Es una situación especial porque nadie desea ver la imagen que estamos viendo en las calles. Ahora, en mi condición de comandante general del ejército y como jefe de las tres fuerzas, pido, ordeno, dispongo que todo el personal que se encuentra movilizado en las calles debe retornar a sus unidades», sostuvo Sánchez, tras el juramento.

Y agregó: «Zuñiga ha sido un buen comandante y le pedimos que no deje sangre derramada de nuestros soldados».

«Vamos a cumplir lo que dice la norma, la constitución política y vamos a estar siempre dispuestos para que se respete el orden de un gobierno elegido democráticamente», cerró el flamante titular de las Fuerzas bolivianas.

 

Cooperativa La Prensa

Cooperativa de Trabajo y Consumo Ltda La Prensa

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba