
La Resolución 143/2025 cerró, por ejemplo, el programa Participar en Comunidad que tenía como objetivo «promover una mayor participación y articulación de las instituciones, organizaciones y actores de la comunidad a fin de responder de manera integral a las demandas y necesidades locales planteadas en territorio, principalmente de los sectores más vulnerables, favoreciendo el abordaje integral de las políticas sociales, mediante el fortalecimiento de los Centros Integradores Comunitarios y los actores que los conforman, como así también la realización de acciones tendientes al Fortalecimiento para el Desarrollo Humano».
La Resolución 144/2025 echó por tierra el Programa Nacional de Promoción y Protección de Derechos que tenía por objetivo «el fortalecimiento del niño como sujeto de derechos y ciudadano a través de la promoción y divulgación de sus derechos, a fin de garantizar su desarrollo pleno, integración familiar y comunitaria, priorizando su ‘centro de vida’».
También se cerraron los programas Espacio Unzué, Espacio Sarmiento, Espacio Crescencia Boado de Garrigós y Colonia Gutiérrez e Inchausti que habían sido creados para promocionar «la convivencia familiar; fortalecer el sistema de protección y promoción de derechos de niños, niñas y adolescentes, instando el principio de corresponsabilidad que le compete a las organizaciones públicas y privadas».
La Resolución 147/2025 derogó la norma que creaba los Centros de Referencias que garantizaban la llegada de la presencia del ministerio a todo al país para poder prestar asistencia a los niños, adolescentes y las familias.
También se eliminaron los programas Jugando Construimos Ciudadanía y Programa Nacional de Derecho al Juego (JUGAR) que tenía por objetivo “propiciar la producción de conocimiento en la temática del juego en la franja etaria comprendida entre los 0 a 17 años, garantizando de esta manera el derecho al juego de niños, niñas y adolescentes en todo el país”.
Pettovello dio de baja el Programa de Promoción de Actividades Recreativas y Socio Comunitarias, que apostaba por garantizar “el derecho al descanso y al esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas de cada niño”.
Eliminó además la Unidad Técnica para el Abordaje Integral de Derechos y el Departamento de Salud Integral, que buscaba brindar una asistencia sanitaria directa a aquellos niños y adolescentes que se encontraban en institutos que estaban a cargo de la Secretaría de Niñez.
Capital Humano derogó también el Programa de Protección Integral de Derechos de Niñas y Niños con Madres Privadas de la Libertad, que había sido creado para proteger a los menores, cuyas madres se encontraban privadas de su libertad, ya sea en establecimientos penitenciarios o bajo arresto domiciliario.
Se cerró además la Línea Activar, que tuvo como propósito “el establecimiento de diversas acciones de trabajo con adolescencias, abordadas desde una multiplicidad de acciones tendientes a fortalecer espacios de encuentro y participación, que reforzaren los lazos comunitarios y la autonomía progresiva de los adolescentes”.
Y disolvió el Consejo Consultivo de Adolescentes así como también el Programa nacional de Derechos a la Participación Ciudadana de Niñas, Niños y Adolescentes.
Fuente: Minuto Uno