En una iniciativa de alcance nacional, los «embajadores verdes» han desplegado su compromiso por la sostenibilidad en la provincia de Chaco, llevando a cabo acciones concretas que marcan la diferencia a nivel local. Esta red de voluntarios ambientales, que opera en todo el país, ha llegado a la provincia chaqueña, uniendo fuerzas para abordar los desafíos ambientales y fomentar prácticas más sostenibles.
Embajadores Verdes se fundamenta en tres pilares clave: compromiso ciudadano, educación ambiental y acción comunitaria. Este enfoque integral busca no solo generar conciencia, sino también capacitar a la comunidad para adoptar hábitos más sostenibles y llevar a cabo proyectos ambientales locales.
La red opera a través de grupos locales que se organizan a nivel barrial, permitiendo una adaptación a las necesidades y características específicas de cada comunidad. La colaboración con organizaciones, empresas y entidades gubernamentales es esencial para amplificar el impacto y crear sinergias efectivas.
La misión de Embajadores Verdes es clara: transformar hábitos desde lo individual hasta lo colectivo, con el objetivo de construir un futuro más sostenible. Esta transformación se busca no solo a través de la concientización, sino también mediante la acción directa en proyectos de limpieza, educación ambiental y promoción de prácticas responsables.
En el marco de su acción federal, Embajadores Verdes ha llevado a cabo actividades en Chaco. La reciente jornada de limpieza en espacios públicos, en colaboración con la empresa de telecomunicaciones Konecta y su equipo de responsabilidad social empresarial, es un parte de la “acción directa para mejorar el entorno local”. Además, la organización ha brindado capacitaciones sobre comunicación y liderazgo ambiental, fortaleciendo las habilidades de los participantes.
La presencia de Embajadores Verdes en Chaco continua con planes para llevar adelante acciones barriales, capacitaciones y colaboraciones estratégicas, esta red de voluntarios trabaja bajo la primes de que “la transformación ambiental es posible cuando la comunidad se une con un propósito común”.
La acción tomó forma en Resistencia, con la instalación de colilleros en el Parque de la Democracia, abordando de manera práctica el problema de las colillas de cigarrillos, una fuente común de contaminación. Simultáneamente, se llevó a cabo una recolección de residuos en el predio, con la participación activa de voluntarios de Konecta y miembros de la comunidad.
«Esta jornada no solo nos permitió contribuir a la limpieza de nuestros espacios públicos, sino que también nos brindó la oportunidad de aprender y concientizarnos sobre la importancia de prácticas más sostenibles», comentó a elDIARIO Paula, parte del equipo de voluntarios de Konecta.
Los participantes expresaron su entusiasmo y gratitud por la iniciativa, destacando la importancia de la colaboración entre el sector empresarial y las organizaciones sin fines de lucro para abordar desafíos ambientales y construir comunidades más sostenibles.